Publicado por Hospital Juan Cardona el 30 de junio de 2016 13:00:00 CEST
La esclerodermia es un conjunto de enfermedades que afectan el tejido conectivo del cuerpo. Este tejido le da soporte a la piel y a los órganos internos. La esclerodermia hace que el tejido conectivo se endurezca y se ponga grueso. También puede causar hinchazón o dolor en los músculos y en las articulaciones.
Algunos tipos de esclerodermia pueden causar que la piel se ponga dura y tensa. Otros tipos de esclerodermia afectan los vasos sanguíneos y los órganos principales tales como el corazón, los pulmones y los riñones.
Aún no se sabe qué causa la esclerodermia. No es una enfermedad contagiosa. Los médicos no creen que sea hereditaria, que se transmita de padres a hijos.
¿Cuáles son los tipos de esclerodermia?
Existen dos tipos principales de esclerodermia: localizada y sistémica. La esclerodermia localizada sólo afecta ciertas partes del cuerpo. La esclerodermia sistémica puede afectar todo el cuerpo.
La esclerodermia localizada afecta solamente el tejido de la piel. No afecta los órganos principales y puede mejorar o desaparecer sin tratamiento. Sin embargo, en algunas personas puede ser más seria y causar daño irreparable a la piel.
La esclerodermia sistémica afecta la piel, los tejidos debajo de ésta, los vasos sanguíneos y los órganos principales.
La esclerodermia es más común entre las mujeres, pero le puede dar a cualquiera, incluso a los niños.
Los médicos diagnostican la esclerodermia a través de:
- Sus antecedentes médicos
- Un examen físico
- Pruebas de laboratorio
- Una biopsia de la piel.
- La esclerodermia puede ser difícil de diagnosticar debido a que hay otras enfermedades con síntomas parecidos. Es más fácil diagnosticarla si usted tiene:
- Síntomas comunes
- Piel que se pone gruesa con facilidad.
Es probable que el reumatólogo (el médico que trata la artritis y otras enfermedades que causan hinchazón en las articulaciones) sea su médico principal y que éste le remita a otros expertos de la salud si usted tiene problemas:
- En la piel
- En los riñones
- Del corazón
- De digestión
- En los pulmones
- En los dientes
- De movimiento
- Del habla.
La esclerodermia no tiene cura, pero los síntomas y daños causados por ésta se pueden disminuir.
La mayoría de las personas con esclerodermia padecen del fenómeno de Raynaud. Éste puede afectar los dedos, los pies y las manos, haciéndolos cambiar de color cuando se tiene mucho frío o ansiedad. Para aliviarlo, usted puede:
- Dejar de fumar.
- Abrigarse bien y mantener pies y manos calientes.
- Hacer ejercicios para relajar el cuerpo.
- Consultar con su médico sobre medicamentos que dilatan los vasos sanguíneos pequeños y ayudan a la circulación.
- Consultar con su médico sobre medicamentos para tratar las úlceras y llagas en la piel.
Rigidez y dolor en las articulaciones
La rigidez y el dolor son consecuencia del endurecimiento de la piel alrededor de las articulaciones y de la hinchazón en las articulaciones. Para aliviarlos, usted puede:
- Hacer ejercicios de estiramiento para mejorar la movilidad de las articulaciones.
- Hacer ejercicio regularmente (la natación es el mejor ejercicio).
- Tomar medicamentos para aliviar el dolor y la hinchazón; pida al médico que le recomiende el más adecuado.
- Aprender a realizar las tareas cotidianas sin esforzar mucho las articulaciones.
Problemas de la piel
La esclerodermia causa acumulación excesiva de colágeno en la piel. El exceso de colágeno hace que la piel se reseque y se ponga rígida. Para aliviar esto:
- Use cremas y lociones a base de aceite después de bañarse.
- Use protector solar.
- Use un humidificador.
- Evite los baños o duchas calientes.
- Evite los jabones, limpiadores y químicos fuertes o use guantes de goma si tiene que usar esos productos.
- Haga ejercicio con regularidad.
Resequedad en la boca y problemas de los dientes
Si tiene la piel de la cara muy rígida, podría tener dificultad para llevar un régimen de higiene dental adecuado. La resequedad en la boca acelera el daño a los dientes. El daño a los tejidos de la boca puede causar la caída de los dientes. Para evitar estos problemas:
- Cepíllese los dientes y use hilo dental todos los días.
- Hágase exámenes dentales con frecuencia.
- Visite al médico si le salen llagas en la boca o si tiene dolor o dientes flojos.
- Pregúntele al dentista sobre enjuagues y pastas dentales especiales.
- Aprenda cómo mantener la boca y la cara flexibles.
- Mantenga la boca húmeda, tome mucha agua o chupe hielo. También puede usar goma de mascar o chupar dulces sin azúcares añadidos.
- Evite usar lavados bucales que contengan alcohol.
- Si la resequedad en la boca persiste, pregúntele al médico qué medicamentos podrían ayudarle.
Pueden además manifestarse problemas digestivos, lesiones pulmonares, fatiga, problemas de corazón o de riñones. Además puede provocar problemas de autoestima debido a las lesiones en la piel. La información sobre la enfermedad y el apoyo de la familia son muy importantes para este tipo de enfermos.
Las investigaciones y nuevos tratamientos están ayudando a las personas con esclerodermia a sentirse mejor y a mantenerse activas por mucho más tiempo de lo que les era antes posible.