Con estas recomendaciones, desde el Hospital de Molina, os deseamos que paséis un verano saludable.
INSOLACIONES O GOLPES DE CALOR
La insolación es un problema relacionado con la termorregulación del cuerpo. Se produce debido a una exposición excesiva a los rayos ultravioletas del sol. El golpe de calor aparece cuando el cuerpo pierde el control de la temperatura, que asciende más allá de los 40ºC. Las personas con mayor riesgo de sufrir estos síntomas son los ancianos, los niños y los que sufren algún tipo de enfermedad crónica. Sus síntomas son: dolor de cabeza, fiebre, sensación de postración, respiración agitada, vómitos, trastorno de la visión,… pudiendo llegar al coma.
En caso de que aparezcan estos síntomas se deberá actuar de la siguiente forma:
– Coloca al afectado en lugar fresco y a la sombra.
– Túmbalo con las piernas ligeramente elevadas.
– Aligérale la ropa.
– Coloca compresas de agua fría o hielo sobre todo el cuerpo, en especial las extremidades y el corazón.
– Fricciona con fuerza las extremidades y el tronco hacia el corazón.
– Trasladarlo rápidamente al enfermo a un centro sanitario.
EXPOSICIÓN AL SOL
Durante los meses de verano debemos ser muy conscientes de los riesgos que entraña una exposición al sol sin protección. Tenemos que concienciarnos de que en esta época del año, cuando dedicamos gran parte de nuestro tiempo libre a actividades que suponen un mayor contacto de nuestra piel con los rayos solares, la adecuada protección es fundamental para evitar daños a la salud. Además, debemos recordar que los efectos negativos de la exposición prolongada al sol son acumulativos.
Hay que evitar la exposición al sol en las horas centrales del día (de 12 a 17 horas) y evitar exposiciones prolongadas o dormirse al sol; cubrirse adecuadamente la piel, la cabeza y los ojos con ropa, sombreros o gorros y gafas de sol; y utilizar productos de protección solar adecuados a nuestra edad, tipo de piel y zona del cuerpo en la que se aplican. Estos protectores solares deberán aplicarse treinta minutos antes de exponerse al sol y renovarse cada dos horas y después de cada baño.
Se debe proteger especialmente a los niños, ya que la población infantil resulta especialmente susceptible de una sobreexposición al sol en esta época del año, cuando disfrutan de vacaciones. Su delicada piel hace que, además, los efectos de esta sobreexposición puedan ser en ellos más perjudiciales. Debemos evitar también que los niños menores de 3 años estén expuestos al sol. Del mismo modo, hay que tener en cuenta que el riesgo de quemaduras solares se incrementa con la altura (cada 300 metros, aumenta un 4% el poder de las radiaciones ultravioletas). Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad.
DESHIDRATACIÓN
La deshidratación se produce cuando la salida de agua y sales de nuestro organismo es superior a la entrada.
Se aportan líquidos y sales a través de las bebidas y alimentos.
Se pierden con el sudor, la respiración, las heces, la orina y con determinados trastornos: vómitos, diarreas, fiebre, golpes de calor…
Los niños y los ancianos son más susceptibles a sufrir deshidrataciones. ¿Qué hacer?:
– Bebe suficientes líquidos.
– Evita el excesivo abrigo de los niños, usando ropas que se puedan poner y quitar fácilmente.
– Protege la piel de la exposición directa al sol con ropas sueltas y claras.
– En la playa o en el campo, evita la exposición al sol durante las horas centrales del día y aumenta la toma de líquidos. Haz frecuentes pausas de descanso.
– Evita realizar ejercicio intenso en ambientes calurosos.
– Toma alimentos que proporcionen sales y agua como el gazpacho, las ensaladas…
– Si percibes algún signo de deshidratación (decaimiento progresivo, sed, piel seca, ojos hundidos, dolor de cabeza, mareos…), suspende la actividad que estés realizando. Ponte en un sitio fresco. Aplica a la piel compresas de agua fresca. Bebe frecuentes y pequeñas cantidades de líquido
PICADURAS EN EL MAR
El Hospital de Molina os informa de las recomendaciones del Instituto de Ciencias del Mar de Barcelona.
Prevenir:
1. Evitad nadar en aguas infestadas, sobre todo después de una tormenta, ya que los pinchazos los pueden provocar restos de tentáculos dañados que flotan.
2. Tened cuidado con las medusas aparentemente muertas o cerca de la orilla.
3. Llevad ropa adecuada cuando practiquéis snorkel o submarinismo, como trajes acuáticos de pantalón largo y guantes.
4. Aplicar productos que contengan agentes (extracto de plancton) que repelen a las medusas, provocando que los tentáculos resbalen sobre nuestra piel.
Qué hacer ante una picadura de medusa:
1. No frotar la zona afectada ni con arena ni con la toalla.
2. No limpiar la zona de la picadura con agua dulce, usar siempre agua salada. NUNCA AGUA DULCE.
3. Aplicar frío sobre la zona afectada durante 15 minutos usando una bolsa de plástico que contenga hielo.
4. Nunca aplicar hielo directamente a no ser que sea de agua marina y si el dolor perdura hay que aplicar de nuevo la bolsa de hielo durante otro cuarto de hora.
5. Extraer cualquier resto de tentáculo que permanezca adherido a la piel, teniendo cuidado con los dedos.
Por último, si pese a seguir estos consejos el estado de la víctima empeora progresivamente y se detectan complicaciones respiratorias, convulsiones o alteraciones cardíacas, ha de ser llevada inmediatamente al hospital para que le traten de estas afecciones. “Además, las personas que han sido picadas una vez están sensibilizadas, con lo que una segunda picadura puede producir una reacción más severa”, advierte el Instituto.
PICADURAS DE INSECTOS
Con el buen tiempo es habitual hacer excursiones para disfrutar, solo o en familia, de los numerosos espacios con los que contamos en nuestra geografía. Pero estas salidas ociosas pueden verse empañadas por la tan molesta visita de diversos insectos, algunos de ellos pueden ocasionarnos algún que otro problema.
– Si sales al campo lleva siempre calzado adecuado, no andes nunca descalzo por la hierba y mira siempre por donde pisas.
– Si haces una comida al aire libre tapa los alimentos, para que no acudan insectos.
– Procura tener tu vacuna antitetánica al día.
Si a pesar de todas estas precauciones sufres un picotazo, recuerda:
– Limpia la zona de la picadura y quítale el aguijón si ha quedado clavado.
– Aplica hielo en la zona afectada, si no tienes hielo a mano, sustitúyelo por compresas de agua con vinagre o amoniaco.
– Extiende sobre la zona afectada una pomada analgésica para el dolor o con antihistamínicos para la inflamación.
EL DÍA DESPUÉS
Durante esta época del año son frecuentes las jornadas intensas de fiesta y diversión, que nos alegran, nos relajan y despejan la mente, nos permiten compartir con amigos y disfrutar de los placeres del comer y el buen beber, tienen siempre, desdichadamente un “día después”.
La rutina del cuerpo humano no simplemente se limita a las costumbres y nuestros rituales diarios, hay una rutina, es decir un orden y un horario bioquímico. Ciertas sustancias se producen en ciertos momentos del día, los jugos digestivos están disponibles en nuestros horarios habituales de ingerir alimentos, el reloj biológico nos indica cuándo hay que dormir, y el metabolismo guarda un ciclo riguroso en 24 horas.
Un día atípico puede romper la armonía. Un día festivo intenso siempre se acompaña de excesos en el beber, en el comer y un defecto en el descanso.
El exceso de bebida alcohólica, o las mezclas, condicionan un nivel en sangre muy importante de alcoholes de diferente orígen, y, como se bebe poco a poco, la tolerancia hace que nuestro cuerpo admita más.
Igual pasa con los alimentos, apenas le damos una pausa al estómago, al hígado, al páncreas y a todo el resto del tubo digestivo. Comemos y picoteamos sin cesar durante muchas horas, alimentos variados, suculentos, unos dulces, otros salados, ácidos o amargos, hay de todo en una buena mesa.
¿Qué hacer el día después? Fundamentalmente esperar que nuestro cuerpo logre deshacerse de toda su sobrecarga, lo cual puede suceder lentamente y con solo una sensación de cansancio y torpeza. Beber abundante agua es excelente, parte del dolor de cabeza en estos casos es por deshidratación cerebral y hace falta restituir. Las bebidas alcohólicas nos deshidratan, y además no sacian la sed, una doble trampa.
¿Comida? Sí hay que comer, ligero, esencialmente vegetariano, comer frutas, tomar zumos o alguna ensalada tibia de hojas escaldadas, una tortilla ligera y algo de pan integral.
Y descansar, si es posible. Precaución a los conductores, al siguiente día del exceso de bebida alcohólica, aún sin la sensación de embriaguez, no estamos al ciento por ciento de percepción, estamos algo torpes y lentos y es preferible no conducir o hacerlo extremando los cuidados.
HÁBITOS Y ESTILO DE VIDA SANOS
Hábito es la forma de proceder o conducirse adquirido por aprendizaje, de acuerdo a costumbre, tradición, cultura o por tendencias personales. El conjunto de hábitos de una persona van conformando el Estilo de Vida. Cuando hablamos de hábitos y estilo de vida sano nos referimos a aquellas conductas que cultivamos que mejoran nuestra salud, es decir, el perfecto estado de bienestar físico, mental y social.
Las comodidades de la vida moderna influyen en la formación de hábitos poco sanos, la comida rápida, la falta de ejercicio físico, los alimentos con alto contenido en calorías, la tendencia a dormir menos horas, al desorden en horarios de alimentación, la falta de descanso de calidad.
Además existen otras costumbres en general aprendidas, son el hábito de fumar y la ingestión excesiva de bebidas alcohólicas, que llegan a convertirse en factores que comprometen mucho la salud.
El desarrollo de las ciencias farmacéuticas ha logrado que exista una pastilla para cada malestar, por pequeño que sea, de manera que nos hemos acostumbrado a ser intolerantes con las más mínimas molestias, como consecuencia de esto, nos atiborramos de sustancias químicas sin una justificación real.
Resulta mucho más cómodo y requiere de menos esfuerzo personal y de disciplina tomar pastillas a llevar una dieta o hacer ejercicios para mantener un adecuado peso corporal. Pero lo peor es que no existe el medicamento mágico que te permita seguir comiendo sentado y además bajar de peso.
La salud implica una responsabilidad individual por parte de cada uno y nadie puede cuidarnos como nosotros mismos.
Los malos hábitos tienen un inconveniente adicional, son aprendidos por los pequeños de la familia, quienes nacen y crecen bajo un sistema de costumbres dañinas que luego asumen como única forma de vida cuando llegan a la edad adulta.
Se dice que un niño obeso, lleva a un adolescente obeso y luego a un adulto obeso. Aquí influye tanto la forma de comer en su hogar, como la tendencia a los juegos de ordenador en detrimento del deporte al aire libre. Lo cual lleva al sedentarismo desde la infancia.
Existen cuatro pilares fundamentales para lograr un Estilo de Vida Sano:
1-Correcta alimentación
2-Realizar sistemáticamente ejercicios físicos
3-Eliminar hábitos tóxicos
4-Cultivar una actitud positiva ante la vida y la sensación subjetiva de salud.
Esto último incluye asistir al médico oportuna y sistemáticamente para beneficiarse de los programas de prevención, los chequeos periódicos de los enfermos crónicos y los chequeos preventivos de las personas sanas, sobre todo cuando llegan a edades de riesgo, es decir por encima de los 50 años
COMBATIENDO EL CALOR
Las altas temperaturas características del verano hacen menos eficaz el efecto refrigerante de la transpiración a través del sudor, la piel se recalienta y se percibe una sensación desagradable. Los asiáticos establecidos en Europa acostumbran a utilizar un recurso antitérmico consistente en humedecer una toalla y frotarla en cara, hombros y pecho. Se elimina así el exceso de grasa que hace de capa aislante, y el agua fresca enfría la piel. Hay que permanecer hidratado, además, bebiendo líquidos.
EL LIMÓN Y LA SED: en tiempos de mucho calor es normal sentir sensación de sed por la pérdida de agua corporal, tanto por evaporación a través de la piel, como por el sudor. Muchas veces beber agua no nos proporciona saciedad y persiste el deseo de hacerlo una y otra vez. Para estos casos nada como unas gotas de limón en el agua clara. Las frutas cítricas provocan la acidificación suficiente para que las papilas gustativas sean estimuladas, se satisfaga el paladar a plenitud y se evite la ingestión desesperada.
CALAMBRES NOCTURNOS
Si los calambres en las piernas le despiertan en la noche, no se alarme, son debidos por lo general a músculos fatigados. A veces hay que aplicar calor, masajear y estirar el músculo o ponerse de pié por un momento. Si padece alguna enfermedad que le obliga a tomar medicación para perder líquidos, esta puede ser la causa. En este caso: tome zumo de naranja durante el día y coma tomates y plátanos. Estos alimentos contienen los minerales que se necesitan para la relajación.
PIE DE ATLETA
El llamado piE de atleta es en realidad una enfermedad provocada por hongos que infectan los pies. La humedad y la oscuridad favorecen su aparición por lo que es menos frecuente en las mujeres, que usan modelos abiertos en épocas calurosas. Si no se usan medias, se recomienda secar bien los pies, exponerlos al aire antes de calzarlos, y cambiar a unos zapatos más ventilados. Ante la primera picazón es recomendable visitar al médico.
INSOMNE BUSCANDO EL SUEÑO
La incapacidad de quedarse dormido o insomnio provoca nerviosismo progresivo con sensación de miedo, desamparo, ira, desesperación, y síntomas físicos por estimulación simpática: “salto del estómago”, contracturas musculares o palpitaciones. Muchas personas buscar el sueño acostándose boca abajo, con lo que la parte superior del abdomen queda comprimida por el peso del cuerpo. Este efecto mecánico alivia los síntomas simpáticos y favorece la sedación, dando libre acceso a la conciliación de un sueño reparador.
INTERTRIGO
En el verano la transpiración y la alta temperatura condicionan el medio ideal de calor y humedad para que la piel se convierta en fácil asiento de enfermedades por hongos. Los lugares más frecuentes son las zonas de pliegues del cuerpo que se cubren de ropa, es decir, axilas e ingles. La mejor forma de evitarlo es usando ropa clara y fresca cuando estamos en público y lo más ligera posible en casa. La otra medida es secar bien estas regiones. Si estas medidas fracasan hay que acudir al especialista
LIMPIEZA DE LOS OÍDOS
El oído es una zona delicada y su aseo requiere de especiales cuidados. La sustancia llamada cerumen sirve de aislante de la humedad, protege de infecciones y amortigua las vibraciones extremas por lo que no debe eliminarse, a no ser que forme tapones compactos. Introducir palillos, orquillas u otro objeto con intención de limpiarlo es peligroso. La mejor higiene se hace durante el baño diario, enjabonando la superficie de la oreja sin intentar introducir agua jabonosa en su interior.
ALGUNOS KILOS DE MÁS
Una vida larga y saludable está estrechamente relacionada con el peso corporal. Cada día hay en el mundo desarrollado más personas con demasiado peso. La civilización propicia que esto suceda, tanto por el estilo de alimentación como por la baja actividad física. Pero todo tiene solución: el ejercicio está al alcance de todos y nos proporciona bienestar y salud física y mental. Comer frutas, además, en lugar de ingerir bebidas dulces proporciona las vitaminas y minerales necesarios para una buena salud.
AFTAS BUCALES
Casi cualquier persona ha sufrido alguna vez de esas molestas lesiones que brotan en la mucosa de la boca y que técnicamente reciben el nombre de aftas. Se trata de pequeñas llagas muy dolorosas y duraderas que aparecen aisladas o en grupo. Su aparición se atribuye a factores alérgicos, digestivos, infecciosos o psicológicos. Existen decenas de “métodos” caseros para curarlas pero resultan inefectivos. Lo recomendable es acudir al médico y dejarse llevar por él. Es un consejo sano para ahorrar sufrimientos innecesarios.
ALIMENTANDO EL CEREBRO
Utilizar el cerebro es darle salud. Aumentar sus bancos de memoria y activar áreas ociosas son formas de aportarle un tipo especial de nutriente. Tan conveniente es desarrollar habilidades manuales como adquirir sabiduría académica. Por lo tanto, si es un trabajador manual, ocúpese de cultivar la lectura, la conversación y disfrutar del arte en todas sus formas. Si es un intelectual, practique ejercicio o realice labores artesanales. Recuerde, aquellas personas que más usan su cerebro, padecen menos demencia senil y la enfermedad de Alzheimer.
El HUEVO Y LA SALMONELOSIS
En el verano es habitual oír con cierta frecuencia de la Salmonelosis humana, que es una enfermedad infectocontagiosa producida por enterobacterias del género Salmonella. Comprende un conjunto de cuadros clínicos cuya principal manifestación es la gastroenteritis aguda, una de las intoxicaciones alimentarías más comunes causadas por agua y alimentos contaminados, especialmente carnes y huevos frescos.
El huevo es uno de los productos biológicos más difundidos en la alimentación humana. Su versatilidad lo hace imprescindible en todas las cocinas del mundo. Pero hay que tener en cuenta que su cáscara puede ser asiento de colonias bacterianas del género salmonera, que habitan el cuerpo de la gallina. Estos microbios se adhieren a la corteza y al romperse contaminan el interior. Por lo que no debe romper el huevo en el borde de los recipientes donde los vaya a batir.
No separe las claras y las yemas con la propia cáscara del huevo.
Cuaje bien las tortillas y cuando prepare mayonesa hágalo con la máxima higiene, de esa manera evitaremos cualquier microorganismo residente y con ello enfermedades diarreicas.
EL CUIDADO DE TUS PIES
En cada paso que da cada uno los pies, soporta todo el peso del cuerpo. Es conveniente utilizar siempre un calzado cómodo, de preferencia cerrado, con un tacón moderado y bien ajustado. Si camina largas distancias use zapatilla deportiva de suela de goma, y con medias gruesas de algodón. En el verano, es preferible escoger entre las sandalias los diseños que cubren el talón. Si realiza un viaje largo en autobús o en tren, los pies tienden a inflamarse. Cuando tenga oportunidad descanse elevándolos unos minutos a una altura por encima del corazón, así mejorará su circulación.
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