El músculo bíceps tiene dos tendones en el hombro – la porción larga del tendón del bíceps (PLB) y el tendón de la cabeza corta. El PLB es de aproximadamente 9 cm de largo y tiene que viajar a través de una ranura estrecha en la parte delantera del hombro. A continuación, tiene que doblar a través de 90 ° para entrar en la articulación del hombro y luego insertarse en el labrum en la parte superior de la cavidad glenoidea. Este curso bastante tortuoso coloca el tendón en un riesgo de inflamación.
Cuando el tendón PLB se inflama esto puede producir dolor en la parte delantera del hombro, lo cual puede ocurrir espontáneamente o estar asociado con problemas del manguito rotador.
A veces el tendón de PLB en el hombro puede romperse y dar lugar a una caída del relieve muscular hacia abajo, lo que se llama deformidad en “popeye”.
La tendinitis de bíceps es una inflamación de la cabeza larga del bíceps del tendón.
A veces, el tendón se inflama después de una caída o lesión por ejemplo, levantar objetos pesados, pero a veces puede presentarse por sí sola. En las personas de mediana edad y mayores la tendinitis del bíceps se encuentra por lo general asociada con otras patologías de hombro, tales como roce o roturas del manguito de los rotadores.
La tendinitis del bíceps puede ser muy dolorosa. El dolor se puede extender hacia abajo en el músculo bíceps.
La ecografía es útil para ayudar a diagnosticar la tendinitis de bíceps y una rotura del manguito rotador. Tratamiento: La tendinitis del bíceps se puede manejar sin necesidad de cirugía.
El tratamiento generalmente consiste en un período de reposo del brazo acompañado con antiinflamatorios y fisioterapia.
A veces, las inyecciones se pueden utilizar tanto para ayudar con el diagnóstico como para reducir el dolor y la inflamación. Las inyecciones pueden ser con un anestésico local y un esteroide, esto tiene un pequeño riesgo de conducir a la ruptura del tendón por lo tanto se tienen que usar con cuidado y no repetir la infiltración más de 2 o 3 veces en un año.
Nosotros realizamos esta infiltración con control de ecografía de esta forma evitamos lesionar el tendón y mejorar la precisión del tratamiento.
Cirugía:
Si el dolor persiste a pesar del tratamiento no quirúrgico, la cirugía puede ser considerada. La cirugía puede ser o bien con una ‘tenotomía’ o ‘tenodesis’. Si se confirma un desgarro del manguito rotador a menudo se requiere su reparación artroscópica. En la tenotomía se corta el tendón de la porción larga del bíceps sin fijarlo. En la tenodesis, después de cortar el tendón se fija en una posición fuera de la articulación para que no roce en la corredera.
TENOTOMIA VERSUS TENODESIS
Varios estudios y meta-análisis publicados muestran que más del 75% de los pacientes están muy satisfechos con cualquiera de las dos operaciones. Ninguno de los estudios han podido demostrar ninguna diferencia entre las operaciones en cualquiera de las medidas de resultado que comúnmente utilizamos.
La principal diferencia entre las operaciones es el riesgo de desarrollar una deformidad cosmética en “popeye» del músculo bíceps después de la tenotomía.
¿Cómo decidir entre las dos intervenciones?
Esta es una decisión individual hecha entre cada paciente y su cirujano. La mayoría de los pacientes pueden esperar un resultado excelente después de una tenotomía sencilla, sin embargo muchos cirujanos abogan por una tenodesis es pacientes jóvenes y activos.
Ambas cirugía las realizamos por técnica artroscópica lo que permite visualizar todo el hombro y reparar otras lesiones asociadas que pueda haber como roturas del manguito rotador o lesiones del labrum glenoideo.
Diego Giménez Belmonte
Jefe de servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología
Hospital de Molina