- La clave para minimizar las consecuencias de esta lesión reside en recibir asistencia médica inmediatamente después del accidente, ya que, si no se trata a tiempo, se puede cronificar
- La edad, patologías previas, la ocupación del lesionado dentro del coche y su posición en el momento del accidente, las circunstancias del accidente… son factores que determinarán la recuperación y su duración
Molina de Segura, 18 de noviembre de 2021 -. El próximo 21 de noviembre se celebra el Día Mundial en recuerdo de las víctimas de accidente de tráfico. Una de las primeras consecuencias más comunes de un accidente de tráfico por detrás es el conocido como “latigazo cervical”. Una lesión que se produce por un movimiento rápido y enérgico del cuello, hacia atrás y hacia adelante, cuyo síntoma más frecuente es la cervicalgia o dolor cervical. Se localiza tanto en zona suboccipital, parte superior de los hombros, extremidades superiores y zona interescapular y suele ser un color continuo que se asocia a las contracturas y a la pérdida de movilidad.
La responsable del servicio de Fisioterapia de Ribera Hospital de Molina, gestionado por el grupo sanitario Ribera, Ana Mª Dasí Espinosa, explica que ésta no es la única consecuencia: “Otros síntomas del latigazo cervical son las cefaleas de predominio occipital o suboccipital, que pueden irradiarse hacia la región parietal, temporal u orbital. También los vértigos o sensación de desequilibrio, la debilidad y falta de fuerza, el dolor lumbar provocado por la inmovilización de la pelvis con el cinturón de seguridad al tiempo que el tronco se mueve libremente, el bloqueo del sacro y la disminución de la movilidad de la charnela dorsolumbar, las parestesias, las disfunciones de la articulación temporo-mandibular, ansiedad… Son síntomas que aparecen entre las primeras y 72 horas posteriores al accidente”.
La clave para minimizar las consecuencias de esta lesión reside en recibir asistencia médica inmediatamente después del accidente, ya que, según afirma la especialista de Ribera Hospital de Molina, si no se tratan a tiempo, estas lesiones se pueden cronificar: “Cuando hablamos de latigazo cervical, lo más normal es que no queden secuelas, o que éstas sean mínimas. Sin embargo, la existencia de patologías previas, un mal diagnóstico, una incorrecta o inexistente recuperación pueden suponer una cronificación del dolor y complicaciones posteriores. Solo el 10% de los casos se cronifican y condenan al paciente a sufrir dolores de por vida”.
El tiempo de recuperación depende del tipo de accidente y de la persona. La edad, patologías previas, la ocupación del lesionado dentro del coche y su posición en el momento del accidente, las circunstancias del accidente… son factores que determinarán la recuperación y su duración. Hay que tener en cuenta, según afirma Dasí Espinosa, que la mayoría de los afectados se recuperan entre uno y tres meses, sin embargo a otros, el dolor y la incapacidad les dura más de seis meses o incluso se les puede cronificar: “Desde la fisioterapia, nos encargamos de realizar una exhaustiva exploración y establecer un tratamiento hecho a medida con el objetivo de disminuir el dolor, recuperar la movilidad biomecánica funcional del raquis anterior al traumatismo, relajar la musculatura y liberar la tensión del cuello. Con todo esto, se intenta evitar que se cronifiquen las lesiones”.
La fisioterapia dispone de un amplio abanico de técnicas y abordajes terapéuticos para tratar estas patologías: magnetoterapia, termoterapia, crioterapia, electroterapia, cinesiterapia pasiva y activa, punción seca, masajes, osteopatía, inducción miofascial, movilización neurodinámica…