Aún no se comprenden bien algunas de sus características fundamentales, siendo muchos los factores de riesgo que favorecen su desarrollo.
Afecta a determinados territorios vasculares, produciendo numerosas manifestaciones clínicas dependiendo de la zona afectada.
1.-Ateroesclerosis coronaria: Puede producir angina de pecho y en estadios más avanzados Infarto del miocardio.
2.-Ateroesclerosis del Sistema Nervioso Central: Se asocia a Isquemia Cerebral transitoria e Infarto cerebral.
3.-Ateroesclerosis de la circulación periférica: Claudicación intermitente, cuando se trata de las arterias que irrigan las piernas y se manifiesta por dolor al caminar en las pantorrillas casi siempre un número determinado de manzanas o metros, y la gangrena mucho más temida, pues pone en peligro la viabilidad del miembro afectado.
4.-El riñón: Puede producir estenosis de la arteria renal y el consiguiente daño renal permanente. Siendo muy frecuente en este órgano.
5.-La arteria aorta: Es también afectada pudiendo producir estenosis o aneurisma. (Dilatación)
Generalmente la ateroesclerosis se produce en los puntos de ramificaciones arteriales, pues son los lugares donde se producen turbulencias que predisponen ésta.
La ateroesclerosis se inicia con la formación de la “estría grasa”, por acumulación de partículas lipoproteicas en la pared arterial. De las lipoproteínas la LDL (Low-density lipoproteins) que es de muy baja densidad la que conocemos como colesterol malo es la principal causante de esta enfermedad. Los diabéticos con glucosa elevada permanentemente por glucosilación aceleran la ateroesclerosis. Existen varios factores más como son la inflamación, la coagulación sanguínea y la micro circulación que favorecen la formación de la placa ateroesclerótica.
Las lesiones ateroescleróticas afectan a todo el mundo occidental. La mayoría de los ateromas (placas) no producen síntomas y jamás llegan a causar manifestaciones clínicas. Muchos enfermos con ateroesclerosis difusa fallecen como consecuencia de procesos no relacionados sin haber experimentado nunca una manifestación clínica.
La remodelación arterial es la causa de esta variabilidad de la expresión clínica de la enfermedad ateroesclerótica. Hasta que la placa no cubre más del 40% de la luz de la arteria no comienza a estrecharse la luz arterial. Por ello durante gran parte de su evolución el ateroma no produce estenosis capaz de limitar el riego de los tejidos.
En las fases más avanzadas de la enfermedad es cuando suelen aparecer estenosis que dificultan el flujo, manifestándose como cardiopatía isquémica o claudicación intermitente en el caso de las arterias coronarias o las arterias que irrigan las extremidades inferiores por poner ejemplos.
Esta disminución del flujo facilitan la formación, como sabio que es el organismo, de vasos colaterales que hacen que el flujo de la sangre llegue a los lugares afectados yevita que se produzca el infarto o la gangrena si nos referimos a los ejemplos citados.
Después de explicar lo anterior, se sabe que las manifestaciones clínicas de la ateroesclerosis dependen de las características biológicas de la placa de ateroma y del grado de afección de la luz del vaso, y también tener siempre presente que la enfermedad puede permanecer asintomática mucho tiempo hasta que no se produce la ruptura de todos los mecanismos compensadores.
El mayor conocimiento de la aterogénesis permite profundizar en la forma en que los tratamientos actuales pueden mejorar el resultado final, al mismo tiempo que sugiere los nuevos objetivos de intervenciones futuras.
Sobre la enfermedad ateroesclerótica, aunque existe mucha predisposición genética, muchos estudios plantean la existencia de un nexo entre los hábitos dietéticos y el riesgo vascular.
Desde el punto de vista práctico resulta útil agrupar en dos categorías los factores de riesgo vascular:
1.- Los que pueden modificarse con los cambios de los hábitos o con medicamentos.
2.- Los que no pueden modificarse.
Aquí podemos ver visualmente la formación de la placa de ateroma
Formación de la placa de ateroma. Fuente AstraZeneca
Principales factores de riesgo:
- Tabaquismo.
- Hipertensión arterial. 120/80
- Bajas concentraciones de colesterol HDL < 40 mg/ml.
- Diabetes Mellitus.
- Edad Varones > 45 años y Mujeres > 55 años.
- Estilo de vida:
– Obesidad.
– Sedentarismo
– Régimen alimentario aterógeno.
– Factores de riesgo emergente
– Lipoproteínas.
– Homocisteína.
– Factores protrombóticos.
– Factores pro-inflamatorios.
– Intolerancia a los carbohidratos en ayuno.
– Aterogénesis sub-clínica.
Como vemos la enfermedad ateroesclerótica es una de las causas mas frecuentes de enfermedad coronaria y vascular, por no decir la más frecuente.
De aquí que eliminando los factores de riesgo mencionados, podemos prolongar el comienzo de ésta y tener una buena calidad de vida aunque tengamos muchos años.
¿Cómo podríamos prevenirla?
- Controlando las cifras de TA en los valores normales y permanentemente,
evitando salados y tomando medicación en caso de requerirlo.
- Controlando los lípidos es decir las grasas, visitando a su médico, realizar
el control del colesterol, triglicéridos y lipoproteínas como mínimo una vez cada 2 años y de necesitar tratamiento realizarlo cuidadosamente.
- Si es diabético, controlar sus cifras de glucemia en valores normales el
mayor tiempo posible sobre todo en la diabetes tipo II.
- Evitar por todos los medios posibles la obesidad y el sedentarismo que esta
perfectamente demostrado que es uno de los principales factores.
- Como la trombosis es la complicación más grave, está demostrado que el Ácido Acetil Salicílico (Aspirina), reduce este factor inclusive a dosis muy bajas.
- Modificar su estilo de vida.
Por un lado se sabe que la tasa de mortalidad coronaria ajustada a la edad está disminuyendo sin embargo la mortalidad cardio-vascular sigue aumentando por el envejecimiento de la población general, la tendencia hacia una mayor ateroesclerosis es muy pronunciada.
Los retos para convertir la evidencia actual en hechos prácticos son enormes. Hay que aprender a adoptar un estilo de vida saludable, algunos de los obstáculos para implementar la prevención y el tratamiento de la ateroesclerosis basados en la evidencia actual son la economía, la educación, la conciencia de los médicos y la adherencia de los pacientes a los esquemas recomendados.
Algunos de los objetivos en el campo del tratamiento de la ateroesclerosis incluirán la aplicación de los conocimientos actuales sobre el manejo de los factores de riesgo y cuando sea apropiado la farmacoterapia.