El grupo sanitario Ribera tiene más de 7.000 profesionales que trabajan en los nueve hospitales gestionados actualmente por la compañía en cinco regiones españolas, además del personal vinculado al holding, la división tecnológica (FutuRS), la de laboratorio (Ribera Lab) y su central de compras (Ribera b2b). Y el responsable de atraer y cuidar el talento de la organización, y de preocuparse y garantizar el bienestar de todos y cada uno de sus profesionales es el gran equipo de Gestión de Personas que lidera Salvador Sanchis, que asegura que “el factor humano es vital para para cualquier empresa, pero para nosotros más, por la complejidad que tiene prestar un servicio de salud las 24 horas del día, los 365 días del año, a través de profesionales a los que tenemos que cuidar y fidelizar, y esto significa darles lo que necesitan y esperan, en definitiva, cumplir con sus expectativas individuales”.
Y es que ni la búsqueda de empleo por parte de los candidatos ni la atracción de talento desde las organizaciones es como hace unos años. “Nos encontramos ante un cambio de paradigma en el empleo, acelerado por la llegada de la pandemia”, explica Salvador Sanchis, director de Personas del grupo Ribera. “El talento tiene expectativas diferentes. Muchos vienen a trabajar por proyectos, a organizaciones que den respuesta a sus valores, que estén alineadas con lo que pretenden en la vida, y nosotros tenemos que dar respuesta a estas demandas”, asegura, al tiempo que recuerda que Ribera es un grupo sanitario de mano de obra intensiva.
¿Cuáles son los puntos fuertes de Ribera en la gestión de personas?
Además de esta capacidad y flexibilidad para adaptarse al cambio, el responsable de la gestión de personas asegura que “en Ribera apostamos por el empleo estable, de calidad, y por eso somos una de las empresas que más y mejor empleo han generado en las regiones donde trabajamos en el último año”. Además, destaca, el grupo cuenta con un 93% de contratos indefinidos “porque nuestra prioridad es la estabilidad en los puestos de trabajo”.
En la línea del nuevo perfil de candidatos, preocupados por aspectos que van más allá del salario económico, Salvador Sanchis pone en valor las diferentes iniciativas del grupo Ribera para cuidar de la salud y el bienestar de sus profesionales. “Por ejemplo, desde el comienzo de la pandemia pusimos a disposición de todos los profesionales el programa Nos Cuidamos, de apoyo emocional, para darles un soporte extra en momentos muy duros, como los que vivimos sobre todo con la primera ola y el confinamiento, pero también en olas posteriores”, explica Salvador Sanchis, que recuerda que en Ribera “no solo cuidamos de la salud física y emocional de nuestros profesionales, también nos preocupamos por su bienestar”.
La formación, la promoción interna o participar en un voluntariado son iniciativas que cada vez fomenta más empresas que, como Ribera, busca atraer y fidelizar talento. “Apostamos por el valor del salario emocional, que ayuda a que los profesionales nos elijan para trabajar”, explica el responsable de Personas del grupo, que pone como ejemplo la colaboración con la asociación Discamino, en Vigo, para ayudar a personas con diversidad funcional a hacer el Camino de Santiago. Pero además, solo este año el grupo Ribera ha colaborado en la edición del cuento infantil Mi mamá no tiene pelo, escrito por una paciente del grupo para explicar a los más pequeños el cáncer de mama y también en la producción y distribución de una canción infantil para enseñar a los niños a hacer la RCP, entre otras acciones de Responsabilidad Social Corporativa. “Este tipo de acciones engancha y genera mucho compromiso con lo que hacemos”, explica Sanchis.
Otro de los puntos fuertes del grupo sanitario en materia laboral es el compromiso con la igualdad de oportunidades. “Ampliamos ciertos permisos que facilitan la conciliación, tanto de mujeres como de hombres, para que las personas puedan compaginar vida profesional y personal, teniendo en cuenta que cada uno tiene vida personal diferente, unos con hijos, otros sin, y nuestro deber es dar respuesta a todos y cumplir sus expectativas”, explica.
“Nuestra mejor garantía en la gestión de Personas es la que ofrecen los convenios colectivos que aplicamos a los centros de trabajo, referidos a retribución, experiencia, formación, las distintas situaciones del puesto, y que no hacen referencia a ningún condicionante de la persona que ocupa el puesto de trabajo. Este hecho, en sí, es ya un aval de que no hay brecha salarial en nuestro grupo”, explica.
Salvador Sanchis recuerda la importancia que para el grupo Ribera tiene la formación. “Tenemos una escuela de Enfermería y de formación profesional sanitaria propia, así como conciertos con universidades para prácticas y fomentar el acceso al empleo de universitarios, una muestra más de nuestra apuesta por el talento joven”, añade.
Además, destaca la aportación de valor de la innovación y la tecnología en el ámbito sanitario. “Es una de las tres patas de nuestro triángulo del éxito, junto con la gestión clínica moderna y eficiente y los profesionales”, apunta el responsable de Personas del grupo. Muestra de ello, añade, es la división tecnológica del grupo, Futurs, que desde hace algo más de dos años agrupa todos los servicios de tecnología e innovación. “Tenemos responsabilidad para trabajar en la salud del mañana, con las oportunidades y herramientas que nos ofrece el siglo XXI. Ribera trabaja con un modelo de salud responsable, alineado con os Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Agenda 2030”, asegura.
Salario emocional, formación, promoción interna, igualdad de oportunidades, flexibilidad y compromiso social. Todo ello constituye un valor diferencial y un atractivo en el grupo sanitario Ribera para quienes quieren que su trabajo tenga implicaciones más allá de la rutina diaria.
Artículo basado en la entrevista que Salvador Sanchis, director de Personas del grupo sanitario Ribera, hizo para Plaza Tv el pasado octubre y que puede visualizarse en el siguiente enlace