Andrea Rodríguez, coordinadora del servicio de Fisioterapia, desgrana en una entrevista como es el trabajo en esta unidad, ubicada en la Clínica Santo Domingo. «A nuestro servicio, acuden personas de avanzada edad, pero también deportistas en pleno rendimiento. La fisioterapia es una disciplina que está presente en prácticamente cada etapa de la vida y por diversos motivos o lesiones», señala.
-¿Con qué tipo de pacientes se trabaja en el servicio de Fisioterapia?
-En el servicio de fisioterapia tenemos solicitudes de diferentes pacientes: seguros sanitarios privados tales como Adeslas, Sanitas, DKV…, accidentes laborales, accidentes deportivos, lesionados de accidentes de tráficos y privados.
-¿Cuántas sesiones y de cuánto tiempo son necesarias para obtener resultados?
-Depende del tipo de paciente y de la lesión. Es importante que no nos focalicemos en el tiempo de tratamiento que ofrecemos sino la personalización del mismo. Por ejemplo: un paciente que acude a fisioterapia tras una intervención de hombro, necesita asistir a tratamiento con más frecuencia (2-3 días semanales), serán sesiones más cortas, y estarán orientadas a controlar el dolor postquirúrgico y restablecer la funcionalidad de ese hombro (movimiento, fuerza, sensibilidad…), sin embargo, un paciente de edad avanzada que desea mejorar la motricidad en la marcha, acudiendo a una sesión semanal de 1 hora de tratamiento puede obtener resultados notables. Como fisioterapeutas, realizamos una valoración del paciente que acude a consulta, y una vez valorado, establecemos unos objetivos en un tiempo determinado. Atendiendo a esos objetivos, elaboramos un plan de tratamiento, con x sesiones semanales. Una vez transcurridas las sesiones acordadas reevaluamos al paciente para ver qué objetivos se cumplieron y valoramos si hay que cambiar o incorporar nuevas técnicas a la terapia.
-¿Hay que esperar mucho tiempo para obtener una cita?
– Para los pacientes que acuden de forma particular a pedir cita, es decir, sin ningún seguro de por medio, la cita puede demorarse como mucho, 72 horas. Los pacientes que acuden tras sufrir un accidente laboral/deportivo/tráfico también inician tras 48-72 h tras recibir la petición de tratamiento. Podemos atender a un número de pacientes limitados y, en momentos puntuales en los que recibimos muchas solicitudes de tratamiento, puede haber una pequeña lista de espera.
-¿También realizan sesiones grupales?
-Dentro de nuestro equipo, damos especial importancia a la formación en ejercicio terapéutico. Cinco de las seis fisioterapeutas que conformamos la plantilla tenemos la titulación de instructor de pilates, lo que nos permite impartir clases tanto de forma individual como en grupos reducidos. Creemos que es importante dotar al paciente de autonomía en su recuperación y con programas de ejercicio adaptados a las distintas patologías, conseguimos que se involucren y participen en la progresión de su lesión.
También la gente de avanzada edad puede beneficiarse de estos programas de ejercicios para mejorar a la hora de caminar o sentirse más ágiles.
-Conforman el servicio un total de seis fisioterapeutas, ¿hay especializaciones dentro del equipo?
– Gracias a los medios de los que disponemos en el centro, y a ser un equipo con intereses comunes pero también dispares podemos dar solución a la mayor parte de lesiones que se presentan. En nuestro equipo, contamos con una fisioterapeuta especializada en fisioterapia neurológica, Lara Núñez Río, que se inclina desde hace años por el tratamiento de pacientes que han sufrido daño cerebral. Tenemos también una parte importante del equipo (Laura Pérez Beatriz, Silvia González Iglesias, Lucía Teijero López) involucrada en tratar disfunciones del suelo pélvico. Actualmente están cursando diversas formaciones que son impartidas por expertos en la materia. Les gustaría, en un futuro, crear una unidad especializada de suelo pélvico, con la colaboración de los ginecolog@s y médic@s rehabilitadores del centro. Laura Pérez Táboas, fisioterapeuta que forma parte del servicio, nos comenta su interés en especializarse en el ámbito deportivo. En los últimos meses ha cursado diferentes seminarios que completan su formación en este sector. Por mi parte, aunque en un principio me inclinaba por las técnicas invasivas que estaban en auge en la fisioterapia (punción seca, electrólisis percutánea…), ahora estoy más centrada en el tratamiento de patologías menos comunes, como las disfunciones del sistema linfático o el diseño de programas de ejercicio específico para gente de más avanzada edad, con los que podrían mejorar sus capacidades para su día a día. En una población que cada vez tiende más al envejecimiento, es importante que los mayores sepan que siempre se pueden mejorar cosas, la fisioterapia puede ayudarles a envejecer con una mayor calidad de vida.
-Emplean también nuevas tecnologías: electroterapia, magnetoterapia, diatermia, ondas de choque o presoterapia. ¿Para qué sirve cada una de ellas y en qué casos se emplean?
-La electroterapia es un tratamiento que utiliza la corriente eléctrica para estimular zonas lesionadas con el fin de reducir o eliminar el dolor (actuando como analgésico), como técnica antiinflamatoria o para mejorar la actividad muscular. La magnetoterapia se utilizaba al principio como un tratamiento para favorecer la regeneración del tejido óseo. Sin embargo, con el paso del tiempo ha quedado demostrado su poderoso efecto de regeneración tisular, debido a los cambios fisiológicos que provoca en el organismo humano. La magnetoterapia consiste en la utilización de un campo magnético con imanes terapéuticos. Además de ser empleado con el fin de favorecer la regeneración ósea también se utiliza en procesos inflamatorios y múltiples patologías que cursan con dolor local. La diatermia / tecarterapia / radiofrecuencia es corriente de alta frecuencia que penetra en las capas más profundas produciendo un efecto térmico, también biológico a nivel celular. Esta técnica acelera el metabolismo de las células, aliviando la inflamación con mayor rapidez que las técnicas convencionales. Con esta técnica conseguimos controlar el dolor y mejorar el estado de los tejidos a la vez que reducimos los plazos de recuperación. Las ondas de choque son ondas acústicas de alta frecuencia y energía que se aplican en el tejido lesionado con el objetivo de recuperarlo. Es una técnica que se ha utilizado en el ámbito médico, por ejemplo, para eliminar y disolver cálculos renales (litotricias), pero hoy se ha diversificado y su espectro de tratamiento se ha extendido en el campo de la fisioterapia. Las ondas de choque en fisioterapia se han confirmado como un excelente recuperador de lesiones. La presoterapia consiste en aplicar presiones de aire sobre diferentes partes del cuerpo para favorecer el drenaje linfático. Esta técnica promueve, además, la oxigenación de los tejidos y recupera la elasticidad cutánea facilitando la regeneración tisular.
-¿Cuál es la lesión más común que se trata en este servicio?
-Quizás las lesiones más comunes sean las lesiones de espalda, hombro y rodilla.
-¿Existe un perfil determinado de paciente?
-No, no tenemos un perfil determinado. A nuestro servicio, acuden personas de avanzada edad, pero también deportistas en pleno rendimiento. La fisioterapia es una disciplina que está presente en prácticamente cada etapa de la vida y por diversos motivos o lesiones.
-¿Se colabora en coordinación con alguno de los servicios del hospital?
-En este momento, el servicio de traumatología del hospital es el que más paciente nos deriva y queremos aumentar la colaboración con otros servicios como neurología, ginecología o geriatría.
Si quieres pedir una cita con nuestro equipo de fisioterapia, llama al 982 10 57 56