- Este tratamiento estimula la circulación sanguínea, mejorando las funciones de los tejidos, su cicatrización y recuperación, aumentando el metabolismo celular y actuando como drenante, analgésico y antiinflamatorio
- Ayuda a recuperar el tono muscular, a mejorar problemas de incontinencia urinaria, dolor perineal y en las relaciones sexuales, así como la disfunción eréctil y la recuperación de episotomías y cesáreas
Lugo, 29 de agosto de 2023.- El deterioro del suelo pélvico puede estar en el origen de problemas como la incontinencia urinaria, fecal o de gases, dolor en la zona perineal, molestias en las relaciones sexuales e incluso una disfunción eréctil. De ahí la importancia de la prevención y tratamiento para la recuperación de los músculos y ligamentos que rodean la cavidad abdominal en su parte inferior, es decir, de la zona que conocemos como suelo pélvico. La radiofrecuencia se ha convertido en un tratamiento estrella para su recuperación, junto con técnicas como los ganchos, la punción seca o los dispositivos biofedback, además del entrenamiento supervisado por fisioterapeutas, tal y como explican desde el Servicio de Fisioterapia del hospital Ribera Polusa.
“La radiofrecuencia se utiliza de manera regular en Fisioterapia porque estimula la circulación sanguínea, mejorando las funciones de los tejidos y en su cicatrización, aumentando el metabolismo celular y actuando como drenante, analgésico y antiinflamatorio”, explican las fisioterapeutas de Ribera Polusa Silvia González, Laura Pérez y Lucía Tejeiro. Por eso, añaden, es un tratamiento muy efectivo para agilizar el aumento del tono muscular del suelo pélvico y mejorar problemas de incontinencia, dolor en la zona o problemas sexuales.
Factores de riesgo y ejercicios recomendados
Es importante recordar que el suelo pélvico sostiene órganos como la vejiga, la uretra, el útero, la vagina y el recto y que, además de la edad, hay factores de riesgo que afectan de manera especial a esta zona del cuerpo, tanto en mujeres como en hombres. Porque si bien el embarazo y el parto son dos de esos factores y, obviamente, solo afectan a las mujeres, tanto la edad como el sobrepeso, la obesidad, los deportes de alto impacto, patologías como la tos crónica y algunas de las intervenciones en el entorno del suelo pélvico pueden afectar a la función de esta zona en ambos sexos.
Por ese motivo, las especialistas de Ribera Polusa recomiendan encarecidamente ejercicios para prevenir problemas en el suelo pélvico, como los de Kegel y los hipopresivos, “que refuerzan la musculatura de la zona”. El embarazo y el parto son considerados momentos de especial riesgo para el suelo pélvico. “Tras la ardua labor del embarazo y el parto, la musculatura del suelo pélvico tiende a debilitarse, siendo esta la principal causa de aparición de incontinencia urinaria o prolapsos de vejiga o útero, en el caso de las mujeres”, tal y como explican las especialistas en Fisioterapia. Por eso, señalan, “una disciplina personal que implique la realización de pautas de ejercicio que active esa área es fundamental para obtener buenos resultados y mejoría”.
Proporcionar pautas posturales adecuadas y llevar a cabo un tratamiento manual es esencial durante el tratamiento de este tipo de disfunciones. “Durante el embarazo y después el parto, el fortalecimiento del suelo pélvico es fundamental a la hora de prevenir este tipo de patologías”, aseguran las fisioterapeutas.
Síntomas del debilitamiento del suelo pélvico
Además, advierten sobre la necesidad de detectar con rapidez los primeros síntomas de debilidad en el suelo pélvico. “Es clave acudir a un especialista si notamos dificultad al empezar a orinar o para vaciar completamente la vejiga, aumento de las ganas de miccionar, un bulto en la zona baja de la vagina, infecciones de repetición del tracto urinario, pérdidas de orina, estreñimiento o dolor en la zona genital durante las relaciones sexuales”, explican. Este último síntoma, aseguran, no es fácil de detectar porque los pacientes son bastante reacios a comentarlo.
Las disfunciones sexuales, aseguran, que repercuten en la directamente en la calidad de vida. Las fisioterapeutas de Ribera Polusa recuerdan que el debilitamiento del suelo pélvico puede provocar dolor durante o después de las relaciones, disminución de la sensibilidad, dificultad para llegar al orgasmo y también para mantener la erección, entre otra sintomatología.