Recordemos que las enfermedades hipertensivas son las que más han crecido en los últimos diez años, pero aun así el consumo en España es mucho mayor que el recomendado. La Organización Mundial de la Salud recomienda un consumo de sal entre 5 y 7 gramos, pero en España la cifra real se eleva hasta una media de 11 gramos. ¿Por qué, a pesar de conocer perfectamente que su consumo hay que reducirlo, se sigue tomando un exceso de sal diario en la dieta de los españoles?
Existen muchas causas bien conocidas a este excesivo consumo como abusar del “salero” en cocina y mesa y consumir alimentos precocinados (conservas, embutidos, quesos, salsas, caldos, salazones, etc.). Pero existe otra causa que se ha descubierto recientemente: la sal provoca adicción. Ésta es la conclusión de un estudio elaborado por las universidades de Duke y Melbourne, en el que se demostró que la necesidad de consumir sal era la misma que la producida por la adicción a la cocaína u opiáceos como la heroína. En este estudio se ha comprobado que tras el consumo de estas drogas o de sal se producían cambios en las mismas zonas del cerebro, aumentando el tamaño y cantidad de las neuronas de esa zona y de dos proteínas relacionadas con la adicción y el placer (dopamina y orexina).
La Sociedad Española de Cardiología, entre otras recomendaciones, anima a los españoles a tomar más productos frescos, alimentos bajos en sal, reducir el consumo de grasas animales y disminuir la sal empleada a la hora de cocinar.
Por lo tanto, si lo que deseas es cuidar tu salud cardiovascular, desde Cardiosalus te animamos a seguir una dieta mediterránea equilibrada con el uso de especias y aceite de oliva como principales aliños.