¿Sabías que el número de pacientes de ictus atendidos en hospitales ha aumentado un 40% en los últimos 15 años, según la Sociedad Española de Neurología (SEN)? El ictus es la primera causa de mortalidad en la mujer y la segunda en el hombre, y además es el primer motivo de discapacidad. Afecta a unas 120.000 personas cada año. En la Comunidad Valenciana, los hospitales públicos valencianos atendieron a 10.500 pacientes con ictus en 2013. Una cifra elevada a pesar de que, en las últimas dos décadas, se ha conseguido reducir su incidencia gracias a la continua mejora de los protocolos de atención y, sobre todo, a la implantación de unidades de ictus en los hospitales.
Con motivo del Día Mundial del Ictus, que se celebró el pasado 29 de octubre, nuestros profesionales han abordado sus principales síntomas y han recordado a los ciudadanos las pautas que deben seguir ante una sospecha de ictus, pues si se actúa con rapidez y urgencia aumentan, considerablemente, las probabilidades de recuperación del paciente.
Entre los síntomas que pueden hacer pensar en un ictus destacan un súbito dolor de cabeza de alta intensidad, la pérdida repentina de la capacidad para hablar, la pérdida total o parcial de la visión en uno o en ambos ojos, la pérdida brusca de movilidad o sensibilidad de medio lado del cuerpo (cara, brazo, pierna) y la sensación de vértigo, desequilibrio o confusión repentina.
Si quieres más información, puedes consultar los vídeos del Observatorio del Ictus que te ayudarán a detectar los síntomas para actuar de manera rápida ante una sospecha de ictus.
Y, ¿cómo deben actuar los profesionales? Esta mañana, el Departamento de Salud de La Ribera ha presentado su nueva “Guía de Actuación ante un Ictus Isquémico para profesionales sanitarios”, con la que se pretende recoger una actualización de los conocimientos neurocríticos y potenciar la eficacia en el abordaje de estos casos complejos para que el paciente recupere la máxima autonomía física, cognitiva y emocional en el menor tiempo posible.
Esta guía recoge, de forma clara y sintetizada, todos los protocolos y procedimientos a seguir desde que un paciente es trasladado por un SAMU hasta el hospital, su entrada al Servicio de Urgencias, su paso por las áreas de Radiología, Cirugía, Cuidados Intensivos o su proceso de neurorrehabilitación. Porque en el ictus, la rapidez en la atención es clave para la recuperación.