La mayoría tenemos claro que debemos cuidar nuestra piel todos los días, a lo largo de todo el año. Piles claras, pero también oscuras, aunque las primeras sufren mucho más que las segundas las consecuencias de una exposición al sol prolongada. Sin duda, el final de la primavera y el verano son momentos más críticos para nuestra piel. Y metidos de lleno como estamos en el verano y en el mes de vacaciones por excelencia, vamos a explicar, en esta entrada al blog de salud, por qué los mismos rayos ultravioleta nos afectan más a unos que a otros.
“Se quema porque tiene la piel clara”. O “no se quema porque es moreno”. Estos son ejemplos de argumentos básicos que muchos utilizamos en nuestro día a día, y que tienen una explicación médica que responde a lo que en Dermatología se conoce como fototipos de la piel. Según la Academia Española de Dermatología y Venerología, el fototipo es “la capacidad de la piel para responder a la radiación ultravioleta y, en función del mismo, se deben adoptar las medidas de protección pertinentes. Su clasificación oscila entre I y VI”. Esta clasificación numérica para el color de la piel la estableció en 1975 Thomas B. Fitxpatrick, dermatólogo de la Universidad de Harvard.
La doctora Irene Latour, jefa del Servicio de Dermatología del Hospital Universitario del Vinalopó, gestionado por el grupo sanitario Ribera, explica que “si el fototipo es bajo, es decir, se tiene una piel más clara, hay mayor riesgo de aparición de lesiones en verano, pues que la piel es más sensible al sol”, y entre ellas destacada la conocida como intolerancia al sol, mal llamada “alergia al sol”. Para evitar los efectos adversos del sol sobre la piel en verano, la doctora Latour insiste en la importancia de utilizar cremas “con protección solar muy alta (SPF 50+), medidas físicas como ropa, gorro o gorra y gafas de sol, y exponerse de forma muy progresiva al sol, muy poco a poco, para que la piel se vaya adaptando”. “En ningún caso ni adultos ni mucho menos niños deben de exponerse al sol sin cremas solares”, porque, añade “la piel tiene memoria y la exposición solar en la edad pediátrica es uno de los factores de riesgo más importante para el desarrollo de lesiones malignas en la edad adulta”.
¿Cuál es nuestro fototipo?
En general, basta con fijarse en el tipo de piel de cada persona para saber si tenemos un fototipo bajo (piel más clara) o algo (piel más oscura). Sin embargo, la Academia Española de Dermatología detalla cómo afecta el sol en general en cada fototipo, cuál es el perfil de cada fototipo, la protección necesaria para cada uno y el tiempo de exposición al sol. Toda la información puede consultarse aquí.
No obstante, este es un pequeño resumen de esa información:
CLASIFICACIÓN DE FOTOTIPOS |
|
Fototipo |
Acción del sol sobre la piel |
I |
Se queman fácilmente, no se broncean nunca |
II |
Se queman fácilmente, se broncean un poco |
III |
Se queman moderadamente, se broncean progresivamente |
IV |
Se queman poco, siempre se broncean bien |
V |
Se queman raramente, siempre están bronceados |
VI |
Se queman muy raramente, están muy pigmentados |
PROTECCIÓN NECESARIA PARA CADA FOTOTIPO |
||||
Fototipo |
Cabello |
Piel |
Tendencia a las quemaduras |
Bronceado |
I |
Pelirrojo |
Lechosa |
Constante |
Nulo |
II |
Rubio |
Clara |
Constante |
Moreno claro |
III |
Castaño a oscuro |
Clara a mate |
Frecuente a rara |
Moreno claro a oscuro |
IV |
Oscuro |
Mate |
Excepcional |
Muy oscuro |
TIEMPO DE EXPOSICIÓN QUE SOPORTA CADA FOTOTIPO |
|
Tipo de piel |
Tiempo de exposición necesaria para la aparición de quemaduras (en minutos) |
I |
10 |
II |
15 a 20 |
III |
30 |
IV |
30 a 45 |
V |
60 |
Por su parte, la Consejería de Salud del Gobierno de Cantabria ha elaborado un cuestionario, para facilitar que los ciudadanos conozcan con exactitud su fototipo y adopten las medidas de protección solar correspondientes, en función del mismo. Puede descargarse aquí.
Vídeo con consejos sobre la exposición al sol
Podcast Spotify sobre la “alergia al sol”
Excelente artículo. Muy bien condensada toda la información.