Cada comienzo de año viene marcado por propósitos relacionados con la salud, entre los que suele estar la intención de hacer dieta para recuperar la figura tras los excesos. Sin embargo, son muchas las dietas que prometen efectos cuasi milagrosos en tiempo récord. Nuestros profesionales advierten del peligro que estas dietas milagro pueden suponer para la salud.
Se trata de dietas bajas en calorías y desequilibradas en nutrientes, en las cuales no se tienen en cuenta la ingesta de todo lo que el cuerpo necesita cada día. Es el caso de las dietas de ayuno, dietas disociadas y dietas basadas en determinados tipos de productos o suplementos nutricionales.
Tipos de dietas milagro
La obsesión por tener un cuerpo perfecto, junto con la presencia de las redes sociales, ha hecho que cada vez haya más tipos de dietas milagro. Aunque todas ellas tienen características en común, la mayoría las podemos agrupar en cuatro grandes grupos:
Las dietas de ayuno se basan en comer principalmente un producto acompañado de otros complementos. Se suelen promocionar con sobrenombres exóticos como “dieta de la piña” o “dieta del mango” y se componen de muy pocas calorías. Esto obliga al organismo a realizar una gran movilización de la grasa y aumenta considerablemente el riesgo de padecer un accidente vascular.
Las dietas disociadas son aquellas en las que no se mantiene la presencia de todos los grupos de alimentos (por ejemplo, evita la combinación de los carbohidratos con las proteínas), lo que produce balances desequilibrados y falta de nutrientes. Con el tiempo, pueden producir un aumento del colesterol, los triglicéridos o el ácido úrico.
Por otro lado, tenemos las dietas basadas en alergias e intolerancias, las cuales están diseñadas para personas con problemas de este tipo. Sin embargo, cada vez hay más casos de gente que no es celíaca y come sin gluten por cuenta propia. De esta forma, acaban haciendo dietas con exclusión de la mayoría de los grupos de alimentos que, además de pérdida de peso, producen un desequilibrio nutricional que no se puede mantener a largo plazo.
Finalmente, las reinas de las dietas milagro: las dietas basadas en suplementos nutricionales. Son dietas muy peligrosas con un elevado coste económico, que acaban teniendo lo que se conoce como efecto rebote y quienes las practican acaban engordando el doble de lo que han conseguido perder.
Cómo perder peso de una forma saludable
El truco para perder peso de una forma saludable sin recurrir a las dietas milagro se basa en cambiar los hábitos diarios, tanto en la alimentación como en la actividad física. Es la mejor forma para no dañar tu salud y evitar en efecto yo-yo.
En este sentido, lo importante es tener siempre presente la pirámide nutricional y comer de todo en cantidades moderadas. Para ello, se recomienda hacer 5 comidas al día y no picar entre horas. La cena siempre debe ser ligera y evitar los embutidos, los dulces, la bollería y el alcohol.
La actividad física es algo indispensable para perder peso. Sin embargo, si eres de los que no les gusta hacer ejercicio, puedes intentar coger la rutina de caminar 1 hora cada día.
Con estos simples cambios, la pérdida de peso es mucho más lenta pero el cuerpo la asimila mucho mejor. Es la mejor forma para no volver a engordar. La clave está en la constancia y la paciencia.
Si deseas conocer más consejos para mejorar tu salud, suscríbete a nuestra newsletter y recibe periódicamente las noticias más destacadas del blog Yo Salud.