A menos de dos días para que comience oficialmente el verano, expertos sanitarios del Grupo Ribera Salud te recomiendan seguir estos consejos prácticos con los que podrás evitar los peligros del sol así como posibles deshidrataciones producidas por el calor. ¡Toma nota!
- Evita la exposición al sol entre las 12 y las 16 horas. Exponte al sol de forma progresiva.
- Aplícate protección solar 30 minutos antes de iniciar la exposición. Repite la acción con frecuencia, sobre todo si te bañas.
- No utilices fotoprotectores para aumentar el tiempo de exposición al sol. Recuerda que debes utilizar un protector solar adaptado a tu tipo de piel y a las condiciones de exposición al sol.
- Protege tu piel aunque el ambiente esté nublado o haga viento. La brisa, al reducir la sensación de calor, hace olvidar el peligro del sol.
- Los niños y las personas mayores deben tener especial cuidado con el sol. Los bebés menores de 6 meses no deben exponerse al sol. Protege a los niños con camiseta, gorra y gafas de sol. No olvides ofrecerles abundante agua.
- Algunos medicamentos (antibióticos, antihistamíticos tópicos, sulfamidas, psicótropos) pueden provocar reacciones alérgicas. Si tomas el sol siguiendo algún tratamiento debes tener especial cuidado para evitar desarrollar sensibilidad al sol. Consulta a tu médico la necesidad de aumentar el grado de protección solar o incluso de evitar la exposición mientras dure el tratamiento.
- En verano debes ingerir agua en abundancia, así evitaremos la deshidratación.
- Los líquidos con cafeína, alcohol o exceso de azucar hacen perder al organismo más líquidos. No sustituyas la ingesta de agua por este tipo de bebidas.
- Los ancianos corren el riesgo de deshidratarse de manera más rápida. Deben permanecer en lugares frescos y, si puede ser, con aire acondicionado.
- Recuerda que lo verdaderamente perjudial para la salud es el exceso y la no exposición al sol. Debes disfrutar del sol con responsabilidad.