El próximo fin de semana se cumplen dos años desde que se detectó el primer paciente Covid en España, en concreto, en el Hospital Universitario de Torrejón, gestionado por el grupo sanitario Ribera. Desde entonces, y una vez superado el confinamiento general de la población y las primeras medidas que restringían la movilidad, hemos tenido que adaptarnos a las diferentes normas y restricciones, impuestas en función de la incidencia acumulada del virus. Estas “olas” de la pandemia que nos ha cambiado la vida han puesto a prueba nuestras fortalezas como sociedad y han destapado algunas de nuestras debilidades, como el estado de la salud mental de la población.
En esta entrada al blog de salud de hoy vamos a hablar de la adicción a los ansiolíticos y antidepresivos y los riesgos que acarrea el consumo de este tipo de medicamentos. Empezamos con un dato muy llamativo: solo en 2021 se consumieron en España más de 61 millones de ansiolíticos, según la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE). De hecho, España lidera el consumo mundial lícito de ansiolíticos, hipnóticos y sedantes, que en 2020 aumentó un 4,5% y superó las 91 dosis diarias por cada 1.000 habitantes, tal y como recoge el último informe de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes.
Magdalena Mateo, responsable de la Unidad de Conductas Adictivas del Hospital Universitario del Vinalopó, alerta sobre el aumento del consumo de fármacos ansiolíticos, sobre todo de las benzodiacepinas, incluso antes de la pandemia. “Son fármacos adecuados para tratar las crisis de ansiedad o situaciones concretas, pero no es conveniente tomarlos más de tres meses por su poder adictivo y sus efectos secundarios sobre la memoria, los reflejos, la capacidad de concentración y de descanso, porque, aunque facilitan el sueño, este no es de calidad”, explica.
Según el informe de la JIFE, España tiene el el mayor índice de consumo de benzodiacepinas, por encima de las 50 dosis diarias por cada 1.000 habitantes, seguido de Serbia, Uruguay, Israel, Estados Unidos y Hungría. Los medicamentos de esta familia más consumidos son el Alprazolam, Lorazepam, Diazepam, Clonazepam, Bromazepam, Lormetazepam y Estazolam.
Magdalena Mateo recuerda que esta medicación “siempre ha de ser prescrita por un profesional” y recomienda descartar “que debajo de esa ansiedad o problema para dormir hay otro tipo de problema de salud”.
Además, para facilitar más recursos en el aumento de la demanda de ayuda para este tipo de problemas, así como en otros relacionados con la ansiedad, el estrés, la tristeza o el desánimo continuado, el grupo sanitario Ribera ha puesto en marcha un programa de terapia psicológica online, Minds, que ofrece una sesión de valoración y una videoconsulta con la terapeuta al mes, además de material personalizado y adaptado para el problema de cada persona, en forma de audios, ejercicios y lecturas, que ayudan al paciente. Puedes consultar más información aquí.
El Ministerio de Sanidad publica información muy detallada sobre el consumo de ansiolíticos e hipnóticos en España, que pueden consultarse aquí y no cabe ninguna duda de que su consumo se ha disparado con esta pandemia.
Efectos secundarios de los ansiolíticos
- Adicción
- Pérdida de memoria
- Falta de reflejos
- Dificultad para concentrarse
- Sueño y descanso de mala calidad
AVISO: La finalidad de este blog es proporcionar información de salud que, en ningún caso sustituye la consulta con un médico. El grupo sanitario Ribera no se hace responsable de los contenidos, opiniones e imágenes que aparezcan relacionados con los blogs, pero si es informado de que existe cualquier contenido inapropiado o ilícito, procederá a su eliminación de forma inmediata.
Los textos, artículos y contenidos de este blog están sujetos y protegidos por derechos de propiedad intelectual e industrial, disponiendo el grupo sanitario Ribera de los permisos necesarios para la utilización de las imágenes, fotografías, textos, diseños, animaciones y demás contenido o elementos que en él aparezcan. El acceso y utilización de este blog no confiere al visitante ningún tipo de licencia o derecho de uso o explotación alguno, por lo que el uso, reproducción, distribución, comunicación pública, transformación o cualquier otra actividad similar o análoga, queda totalmente prohibida, salvo que medie expresa autorización por escrito del grupo sanitario Ribera.
El grupo sanitario Ribera se reserva la facultad de retirar o suspender temporal o definitivamente, en cualquier momento y sin necesidad de aviso previo, el acceso al blog y/o a los contenidos del mismo a aquellos visitantes, internautas o usuarios de internet que incumplan lo establecido en el presente Aviso, todo ello sin perjuicio del ejercicio de las acciones contra los mismos que procedan conforme a la Ley y al Derecho.
Buenísimo artículo, más en esta época donde estamos todos encerrados