Un accidente con el coche es un mal trago para la mayoría de los conductores y sus acompañantes. Pero si además se produce un alcance fuerte, podemos salir de esa experiencia con una lesión cervical, abdominal o en las extremidades que arrastremos durante muchos meses, además del susto.
De ahí la importancia de acudir a Urgencias y hacer un seguimiento médico especializado tras un accidente de tráfico. Y es que las víctimas, tanto conductores como peatones, pasajeros o ciclistas pueden acudir a cualquier centro sanitario privado que esté concertado con las mutuas de accidentes, y recibir una asistencia sanitaria completa y gratuita. Y esta es una información que desconocen muchos ciudadanos: los gastos médicos tras un siniestro los cubre la aseguradora del responsable del accidente y, por tanto, la víctima puede acudir a un hospital privado para ser atendida, aunque no disponga de un seguro de salud.
¿Cuáles son las lesiones más frecuentes tras un accidente?
Las lesiones más habituales entre las víctimas de un accidente de tráfico, según explica la Dirección General de Tráfico, son las lesiones en torso y tórax, lesiones cerebrales, en cabeza, cuello y cara, en las extremidades, en la columna vertebral y en la médula espinal. Fisuras o fracturas en las costillas, golpes contra el salpicadero o el parabrisas, laceraciones por el airbag, y las lesiones en el cuello y la zona cervical, generalmente como consecuencia del “tirón” del cinturón de seguridad son algunas de las más frecuentes. Y las menos, aunque suelen ser más graves, son las que afectan a la médula.
Desde el Hospital Ribera Santa Justa, donde cuentan con una Unidad de Accidentados de Tráfico entre otras 16 especialidades, nos explican que “el esguince cervical puede desembocar en dolores constantes de cabeza y mareos, y a su vez condicionar durante semanas el desempeño de las tareas cotidianas más sencillas”. Añaden, además, que las fisuras y fracturas en las extremidades, como los esguinces en las muñecas, rodillas y tibias son muy habituales en las víctimas de accidentes de tráfico, “aunque son los motoristas, y en ocasiones los ciclistas, quienes acuden con lesiones más graves”.
Lo importante es que la víctima de un accidente tenga la opción de elegir en qué centro quiere ser tratado, tanto en su visita a Urgencias como posteriormente, para tratar sus lesiones y llevar a cabo la rehabilitación. Desde el Hospital Ribera Polusa, también gestionado por el grupo sanitario Ribera, destacan la importancia que tiene para las víctimas de accidentes la posibilidad de elegir “una asistencia sanitaria integral y sin esperas, como hacemos en el Hospital Ribera Polusa”. En función de la gravedad del accidente, en ocasiones la víctima tiene que recurrir a diferentes especialidades y pruebas diagnósticas para garantizar una valoración correcta y una recuperación efectiva. “El paciente lesionado decide libremente dónde quiere recibir la asistencia sanitaria, incluidos los hospitales privados, como Ribera Polusa, y aunque no disponga de un seguro de salud, puesto que son las compañías de seguros de los vehículos quienes asumen los costes”, explican.
Catalogados como lesiones graves en un accidente de tráfico están los traumatismos craneoencefálicos (TCE), en los que se producen pérdidas de consciencia e incluso, fractura craneal como consecuencia de un accidente. En Ribera Polusa, gestionado por el grupo Ribera, cuentan, además de con una Unidad de Accidentados, con una Unidad de Daño Cerebral Adquirido y Recuperación funcional, que atiende a pacientes que han sido víctimas de accidentes de tráfico graves y sufren una lesión de este tipo. Allí se ofrece la posibilidad de hospitalizar al paciente para una recuperación más rápida, facilitando atención médica las 24 horas por parte de un equipo multidisciplinar, con la mejor tecnología para el diagnóstico, y una continuidad asistencial con seguimiento ambulatorio, así como un plan personalizado
¿Qué necesita una víctima de accidente para acudir al hospital que quiera?
Tan solo es necesario presentar el parto amisto del accidente. O en su defecto, el atestado de la Policía o la Guardia Civil si no se ha firmado un parte amistoso. Si por las circunstancias, el paciente ha acudido a Urgencias a otro centro sanitario, deberá aportar a su llegada al centro de su elección ese informe de Urgencias.