Datos, tecnología y calidad asistencial son los ejes que enmarcan el modelo desarrollado por FutuRS, la filial tecnológica de Ribera Salud, para predecir qué pacientes COVID pueden necesitar UCI por complicaciones con la enfermedad. ¿Cómo? El equipo de Data Science de FutuRS ha desarrollado un modelo que analiza y procesa las variables de cada paciente para predecir su evolución, de forma que el conjunto de datos recogidos sirva a los profesionales en la toma de decisiones. Y siempre en base a información objetiva.
Se trata de un arquetipo revolucionario que “aprende” a medida que recibe más datos e información sobre los pacientes. Porque cuantas más referencias se introducen en el modelo, procedentes de todos los pacientes que Ribera Salud atiende en sus centros sanitarios, mejor es su capacidad para avanzar con antelación la evolución de un paciente. Esa alianza entre asistencia sanitaria y tecnología es la que permite a una rama y otra del grupo Ribera Salud avanzar y apostar por una mejora constante en los servicios que pone a disposición de la sociedad.
¿Y con qué fin? El objetivo es siempre adelantarse a las necesidades del paciente para mejorar su asistencia y facilitar en la medida de lo posible su curación y recuperación. Pero además, facilitar el trabajo de los profesionales. Porque este sistema ofrece al profesional una proyección de la evolución de cada paciente, y gracias a ello, puede anticiparse a muchas de las complicaciones y tomar decisiones que pueden suponer un cambio a mejor en la evolución del paciente.
Los profesionales de los hospitales de Ribera Salud trabajan desde la pasada primavera con este modelo, que sigue mejorando y ajustando sus previsiones, cada vez con mayor precisión, puesto que la evolución de la pandemia sigue llevando personas a los hospitales afectadas por COVID.
Ribera Salud tiene previsto ofrecer esta tecnología a los gobiernos de las regiones donde opera, tanto en España como a nivel internacional, como parte de su compromiso con la sociedad. La vocación de servicio público es clave para este el grupo sanitario en todos sus centros y es por eso que apuesta por compartir todas sus buenas prácticas, logros y desarrollos con las instituciones con las que colabora. Así lo han hecho ya responsables de Ribera Salud y de FutuRS en seminarios como el organizado por el IFC (International Finance Corpora-tion) del Banco Mundial el pasado mes de junio.
Mireia Ladios, Jefa corporativa de Calidad de Ribera Salud, asegura que “la detección temprana del empeoramiento clínico supone un elemento diferenciador de calidad, en un entorno de alta exigencia como la actual pandemia del Coronavirus”. Y este modelo cobra aún más importancia de cara al otoño e invierno que se aventura, cuanto menos, complejo en el ámbito sanitario español, por la más que probable coincidencia del virus que paró el mundo hace seis meses y los tradicionales virus relacionados con la gripe, la bronquiolitis, la neumonía etc.
Por eso la responsable de Calidad del grupo sanitario asegura que “el exhaustivo control, recogida y análisis de datos de los pacientes es la base para la creación de este modelo predictivo que permite alertar al profesional clínico de la evolución del paciente, brindándole la oportunidad de revisar y ajustar el plan terapéutico antes de que el paciente empeore más”. Ladios explica que el modelo predictivo se ha construido en base a una selección de variables clínicas, fijadas por los profesionales sanitarios y la literatura médica actual sobre el COVID, y se han empleado técnicas de Data Mining y Machine Learning (ML) para su desarrollo. Además, para conocer el rendimiento del modelo, se han empleado medidas como la sensibilidad, especificidad, área bajo la curva o el F1 score, entre otros.