La credencial ha sido entregada este mañana por Alfonso Rueda, vicepresidente de la Xunta de Galicia y Ángeles Carmona, presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial
El protocolo está integrado en el Plan de Igualdad de Povisa, puesto en macha el pasado año con el acuerdo unánime entre dirección y todos los sindicatos del Comité de Empresa
Viernes, 17 de marzo de 2017.- Povisa ha recibido la acreditación como empresa gallega adherida al ‘Protocolo para la detección y tratamiento en la empresa de situaciones de violencia de género producidas dentro y fuera de los lugares de trabajo’, elaborado por la Asociación Española de Auditores Sociolaborales, en un acto celebrado hoy en la Cidade da Cultura de Galicia, en Santiago de Compostela.
Francisco Susavila, director de Recursos Humanos de Povisa, ha recogido el reconocimiento entregado por Alfonso Rueda, vicepresidente de la Xunta de Galicia, y Ángeles Carmona, presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial.
El protocolo, que ha sido elaborado con la participación de magistrados, inspectores de trabajo, abogados y graduados sociales de reconocido prestigio, tiene como objetivo sensibilizar a los trabajadores, proteger a las víctimas e informarles de las acciones judiciales que pueden llevar a cabo en casos de violencia de género.
Este protocolo forma parte del Plan de Igualdad de Povisa, puesto en marcha para evitar cualquier tipo de discriminación laboral entre hombres y mujeres. El plan fue firmado el pasado mes de diciembre por la dirección y el Comité de Empresa de Povisa, en un acuerdo histórico por ser el primer plan firmado de manera unánime por todos los sindicatos integrantes –UNENF, CCOO, CIG, OMEGA, USO y CGT-SGPS-.
Además del protocolo acreditado, el Plan de Igualdad de Povisa incluye un Protocolo de Acoso, dirigido a evitar que en el ámbito laboral se produzcan comportamientos que puedan ser considerados como acoso –entre otros, ignorar o excluir a compañeros de trabajo, evaluar de forma sesgada su labor, acosar psicológicamente o, en el acoso sexual, efectuar insinuaciones o proposiciones insistentes o que causen malestar-. Para ello, Povisa ha puesto en marcha un comité específico, compuesto por representantes de la dirección y sindicatos, para analizar las denuncias de presunto acoso, dar respuesta en un máximo de quince días y disponer las medidas disciplinarias correspondientes.
Pie de foto.- Francisco Susavila, director de Recursos Humanos de Povisa, recogiendo la acreditación (el cuarto de izq. a dcha.)
