¡Qué lejos se antoja pensar en las relaciones sexuales en la madurez cuando eres joven! Sin embargo, si la vida y la salud nos acompaña, una intimidad satisfactoria con la pareja puede ser eterna. Porque la receta mágica, aseguran los profesionales del grupo sanitario Ribera, es tener una sexualidad sana, basada en la confianza de ambos, durante toda la relación. Y si eso es así, “aunque se produzcan cambios físicos, hormonales o cognitivos, la salud sexual de ambos permanece casi siempre íntegra”, asegura María Luisa Liberal, ginecóloga de Ribera en el Hospital Universitario de Torrejón.
Arnau Castañer, ginecólogo de Ribera en el Hospital Universitario del Vinalopó, nos recuerda que la menopausia es la última regla y el climatelio, la transición de la edad fértil a la etapa tras la menopausia. Y Elena Figueiredo, especialista en Ginecología del hospital Ribera Povisa, añade que dejando a un lado los condicionantes físicos en cada relación, que pueden tener que ver con la menopausia o con problemas de salud de diversa índole, más habituales con el paso de los años, “aconsejamos a las parejas que trabajen la parte psicológica de la relación” y asegura que los hábitos de vida saludables ayudan, y mucho, en este contexto.
“Somos seres sexuados desde que nacemos hasta que nos morimos y no debemos renunciar a las relaciones sexuales satisfactorias aunque experimentemos cambios físicos”, asegura Ingrid Pérez, ginecóloga en el Hospital de Torrejón. Para la doctora Pérez, la menopausia también va asociada a un momento de la vida “con cosas muy positivas que afectan a las relaciones sexuales, como que en general las mujeres tenemos más tiempo para cuidarnos, para ocuparnos de nuestras relaciones, dónde y cómo queramos”.
Pero en lo que todos los especialistas de Ribera coinciden es en la importancia de continuar e intensificar aún más si cabe los hábitos de vida saludables que deberíamos llevar toda nuestra vida. Por lo que respecta a la dieta, la doctora Liberal recomienda los alimentos de origen vegetal, puesto que contienen fitoestrógenos como el trigo. También apunta a la conveniencia de consumir pavo, leche y chocolate por sus efectos estimulantes. Hacer ejercicio, añade, además de reducir el riesgo de hipertensión y facilitar el control del peso, ayuda a liberar melatonina, que facilita un mejor descanso, y endorfinas, que mejoran el estado de ánimo.
En resumen, agrupamos en diez los consejos para ayudar a las mujeres a vivir una sexualidad satisfactoria al llegar la menopausia.
- Mantener una dieta equilibrada, rica en fibra y verdura y pobre en azúcares
- Complementar la dieta con suplementos de origen vegetal (fitoterapia)
- Hacer ejercicio de manera regular y con una intensidad acorde a las posibilidades de cada uno
- Ejercitar el suelo pélvico
- Llevar una buena rutina del sueño y descansar
- Recibir una adecuada exposición solar, mínima en verano y prolongada en invierno
- Facilitar la intimidad emocional con la pareja para encontrar un equilibrio sexual satisfactorio
- Utilizar hidratantes y geles específicos para aliviar la sequedad vaginal y no descartar tratamiento hormonal si así lo recomienda nuestro especialista
- Normalizar los cambios físicos que se producen y adaptar las relaciones de pareja
- Apostar por una sexualidad sana, basada en la confianza de la pareja
En la semana en la que se celebra el Día de la Salud Sexual, nuestros especialistas recuerdan que debemos entender la salud sexual como un bienestar físico y emocional, que no solo se refiere a la ausencia de enfermedad, sino que abarca el respeto a los derechos sexuales y al ejercicio de la sexualidad con respeto al propio cuerpo y al de la pareja.