Empezar la quimioterapia. Cómo prepararnos

El sábado pasado fue el Día Mundial contra el Cáncer y volvimos a ser conscientes de que los nuevos casos de cáncer continúan aumentando cada año. Ello se debe, en gran parte, a los planes de prevención y a los chequeos y revisiones de la población de riesgo, pero también al aumento malos hábitos que influyen como factores de riesgo en el desarrollo de esta enfermedad, en sus diferentes formas. Según datos de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), en 2022 se diagnosticaron 290.175 casos nuevos. 

Un diagnóstico de cáncer, en cualquiera de sus formas, es un golpe en la vida de cualquier persona. Cada año se registran importantes avances en los tratamientos, aparecen técnicas y medicamentos nuevos y los porcentajes de supervivencia aumentan. Sin embargo, un gran porcentaje de casos se somete a quimioterapia, ciclos de diferente intensidad y duración. Y aunque también estos tratamientos han mejorado mucho por lo que respecta al control de los efectos secundarios, vamos a dedicar la entrada al blog de hoy a facilitar algunas recomendaciones, de la mano de los profesionales del grupo Ribera, a los pacientes que van a empezar una quimioterapia.

Recomendaciones generales para la quimioterapia

• Acompañamiento. Generalmente los hospitales permiten acudir acompañado al tratamiento. Es importante no estar solo y, sobre todo al principio, es importante para que toda la nueva información se asimile mejor.
• Protocolo del primer día. Suele pedirse una analítica inicial, tras la cual, se pasa visita con el oncólogo y si todo está correcto, el personal de Enfermería procede a la puesta en marcha del tratamiento en el hospital de día. Se suele entregar al paciente una guía informativa, con consejos y efectos secundarios más habituales del tratamiento, pero lo más recomendable es preguntar a los profesionales cuando tenemos dudas.
• Duración. La duración del tratamiento depende de lo pautado por el oncólogo para cada caso: Los ciclos pueden durar de 1 a 6 horas y puede ser semanales, quincenales o cada tres semanas.
• Qué debemos evitar. Se recomienda evitar internet porque en general la información es muy general y hoy en día cada caso es único y se pautan los tratamientos de manera personalizada. También se debe evitar el alcohol y las bebidas estimulantes y hacer comidas copiosas.
• Entretenimiento y comodidad. Se puede llevar música, una lectura, ordenador o ipad al tratamiento, para pasar el tiempo de forma más amena. También se puede comer y beber, aunque es recomendable evitar las comidas condimentadas, y se aconseja ropa cómoda.
• Efectos secundarios. Generalmente, los efectos secundarios aparecen 2-3 días después del ciclo, aunque en ocasiones algún paciente se siente indispuesto en el momento.
  • Náuseas y vómitos. Las náuseas y vómitos se suelen atajar con medicación que pauta el oncólogo.
  • Diarrea. En ocasiones se sufre algún episodio de diarrea, porque se altera la mucosa del intestino. En estos casos se recomienda dieta astringente, evitar las gastas y la fibra e ingerir arroz y verdura. 
  • Estreñimiento. Si por el contrario se experimenta estreñimiento, hay que tomar alimentos ricos en fibra y aumentar la actividad física.
  • Mucositis. La mucositis en la boca, garganta o tracto digestivo es otro síntoma habitual, que puede provocar desde un leve enrojecimiento hasta llagas. Se recomienda utilizar cepillos de cerdas blandas para la higiene dental y colutorio. Hay enjuagues específicos para estos casos. 
  • Sequedad en la boca. Es otro efecto habitual que provoca la sensación de engrosamiento de la lengua y en ocasiones provoca fisuras en las comisuras de los labios. Los especialistas recomiendan infusiones de menta o aloe vera, antes de cada comida. 
  • Alteración del gusto y el olfato. Se recomiendan carnes blancas porque en las rojas los pacientes notan más sabor metálico. También sucede con el agua y por eso se recomiendan los caldos. El olfato se agudiza y olores que antes no se notaban ahora se agudizan y pueden molestar.

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